Hace unas fechas nos enteramos por ABC que, el hasta entonces, su crítico taurino: Vicente Zabala de la Serna se pasaba a El Mundo y poco después publicó que el profesor Don Andrés Amorós se incorporaba a la crítica taurina de ABC.
Hablar aquí del bagaje profesional del profesor Amorós carece de sentido, por conocido y porque no tendríamos ni espacio ni tiempo para referirlo.
Por lo que a mi respecta me he alegrado enormemente de su nombramiento, no porque estuviera nada en contra de Zabala de la Serna, todo lo contrario, agradecerle que nos haya dejado disfrutar de un modesto espacio de toros en ABC. Aunque nuestros comentarios en los días de Feria se publicaban en la edición escrita de ABC, yo sé muy bien dónde estoy y no soy un crítico taurino de ABC, sólo coordino un blog taurino, es más, las únicas recomendaciones que he recibido nunca de ABC se refieren a que los días de corrida no haga una crónica de la misma (que esa ya la hace el crítico), así que sólo comento mis impresiones y lo que oigo en mi Tendido 2. Al Sr. Zabala de la Serna ni tengo el gusto de conocerlo, ni jamás crucé una palabra con él, lo respeto y lo leo como crítico. Procuro mantenerme en los límites del simple aficionado. Conozco sólo a unos pocos ganaderos, a menos toreros aún y a pocos empresarios.
A Don Andrés Amorós (y le antepongo el Don por el artículo de Antonio Burgos que les enlazo), lo conozco por su dedicación al estudio de Ignacio Sánchez Mejías. Es autor, entre otras, de una biografía sobre él de 1998 que les recomiendo a aquellos que quieran acercarse a esta figura, participó en el documental de La Claqueta “Ignacio Sánchez Mejías. Mas allá del toreo”, presentada en el Festivas de Cine de Sevilla de 2008 y, recientemente ha estudiado, y logrado editar, una novela que Sánchez Mejías tenía manuscrita: “La amargura del triunfo”. También ha colaborado en la admirable exposición «Sánchez Mejías y la edad deplata«, que actualmente puede visitarse en el Casino de la Exposición.
Yo también creo que con Don Andrés Amorós vuelve el Don a la crítica taurina. Lo he felicitado y todos debemos de felicitarnos por ello.
¡Suerte maestro Amorós! Será la suerte de todos.