La Tragedia Sobrevuela El Puerto
El domingo, animado por un vecino de abono de Sevilla, nos acercamos a la plaza de toros de El Puerto de Santa María, fundamentalmente, con la idea de volver a ver a Oliva Soto. La primera sorpresa desagradable fue la pobre entrada. La crisis, la política de precios de la empresa y lo larguísimo y poco atractivo del abono deben de tener algo que ver.
Lo cierto es que desconfiábamos de los toros de Buenavista, pero la corrida estuvo bien presentada, con toros serios y con cuajo. El juego fue distinto, flojos los de Padilla, rajado el primero de Arturo Macías y, en general, con genio y cierto peligro.
La tragedia sobrevoló la plaza al entrar a matar Macías al quinto toro, lo prendió por el vientre, lo enganchó y lo llevó prendido varios metros, mientras el diestro hacía vanos intentos por zafarse. Cuando lo soltó el diestro cayó inerme en la arena, con los brazos abiertos. Se intuía la tragedia. Por la noche nos enteramos que las heridas le afectaban el pulmón, que se lo llevaban a Sevilla a operar pero que, afortunadamente, su vida no corría peligro.
Antes estuvo como es Macías, toreando muy quieto. En el quite a su primero le dio cinco gaoneras sin mover los pies, y eso que el toro tenía genio. Los mentores de este torero deben de replantearse su carrera. No es normal que lo hieran tanto y tan seguido: Valencia, Sevilla, Madrid y ahora El Puerto. Además, mientras he oído a toreros decir que no les importa mucho que les partan los muslos, las heridas en las cavidades abdominal y torácica son otra cosa.
Oliva Soto se sobrepuso al estado de ánimo en que quedó la plaza tras lo de Macias y en el sexto, hizo el esfuerzo, toreó en su estilo, mató bien y cortó dos orejas. Ya en su primero había toreado con mucho mérito a un toro con genio, pero mató muy mal.
Ya de noche veía salir a hombros a Oliva Soto, mientras pensaba que del triunfo a la tragedia media muy poco en el Toro.
Iniciativa Legislativa Popular
Cuando quedan pocas fechas para que se vote en el Parlamento Catalán la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para prohibir los Toros en dicha Comunidad, leemos en mundotoro.com que la Comunidad de Madrid también ha tenido que admitir a trámite una ILP similar, si bien, en este caso, cuenta con pocos visos de seguir adelante.
En esta bendita democracia que no ha tocado vivir, estamos a merced de las mayorías, como debe de ser. Pero en algún caso, pasamos a la dictadura de la mayoría, como parece que vamos a pasar con la prohibición de los Toros en Cataluña, y más ahora en plena vorágine antiespañola por lo de su Estatuto.
A mí, por poner un ejemplo, no me gustan las monterías (con lo que le gusta a un taurino una montería). Es más, estoy por asegurar que a la mayoría de los españoles no les gustan las monterías. Pero no por ello iniciamos una ILP para prohibirlas sobre la base de la crueldad de la suerte, y del sufrimiento de los animales acosados por los perros, heridos y rematados. Como no me gustan, pues no voy y punto, pero respeto a los que les gustan, comprendo que disfruten por cómo (y cuánto) lo cuentan, y entiendo la labor social, económica y ecológica que hacen. Igual que las monterías se podrían prohibir las romerías, los conciertos al aire libre o la pesca deportiva, o sea, cualquier otra actividad que a la mayoría de una comunidad con poderes transferidos no les guste. Prohibir todo con lo que no comulgue la mayoría no es el camino, de ninguna manera.
La iniciativa de ABC por la libertad de ir a los toros ha tenido mucho éxito. El domingo pasado en la Monumental de Barcelona lo que se gritaba era “Libertad”, que es lo que debemos de exigir desde cualquier ámbito de actuación. Toda privación de libertad es un paso atrás que damos, toda parcela acotada por la Administración pública es un retroceso de las libertades privadas. Debemos de exigir a los políticos que nos dejen elegir en libertad y que dejen de prohibir en parcelas que son privadas.
Los Encierros de San Fermín
Ya he comentado otras veces la pasión que levantan los encierros de San Fermín. Es una tradición en muchas casas, que sus miembros vean el encierro juntos a las 8 de mañana. Ahora, la hora de la primera cita tiene que ser después del encierro y también ahora coincido a diario con algún vecino comprando el periódico, justo después del encierro.
Aunque he estado en Pamplona en alguna ocasión, nunca me atreví a correr, ya saben que mi valor es cortito, por eso admiro y envidio a todos los corredores que a las ocho son capaces de cumplir con la tradición. Recuerdo que la mañana siguiente al primer encierro que no corrí, la prensa local publicaba la foto de un toro de Torrestrella con un mozo colgando de cada pitón. Eso fue el previo al segundo encierro que no corrí, por si me quedaba alguna duda.
Cuando cinco minutos antes de las ocho, las cámaras enfocan panorámicas de corredores que calientan a saltitos y estiran para espantar los miedos, siempre veo el recorrido con una pátina grisácea de mañana fría y de peligro. Ya ven, paso miedo hasta en la tele. Después me encanta ver las careras, los golpes, los incidentes y el comportamiento de los toros. Curiosamente los más temidos Miuras son los más nobles para los corredores, y los deseados de encaste Domecq, los más peligrosos. Los Miuras van siempre el Domingo, el día de más gentío porque suelen hacer una carrera muy rápida y sin tirar cornadas. La excepción fue el año pasado donde dieron un espectáculo de comportamiento. Llegaron a tirar de un salto a un fotógrafo que estaba a cuatro metros de altura, y dieron varias cornadas. Este año han sido fieles a su tradición y sólo han dado una cornadita, precisamente al corredor que se había comprometido con TVE a comentar el encierro una vez terminado este. Ya es mala suerte.
Ayer, para entretener los nervios previos al partidazo, vimos la corrida de Miura. Los tendidos de sol estaban vacíos por la protesta de las peñas contra la Alcaldesa, que unos abonados de Pamplona que vieron la corrida en casa se encargaron de explicarme, dándole la razón a la alcaldesa.
La corrida fue entretenida, con un Padilla dándole heroicidad a su espectáculo, un Rafaelillo muy sensato y centrado y un Valverde que no estuvo. Varios toros sorprendentemente manejables.
Los nervios de la final del campeonato del mundo se iban abriendo paso, pero aguantamos hasta que dobló el último, llegando al partido 10 minutos tarde. Después, qué les voy a contar. Esta tarde me tengo que hacer con una camiseta con una estrella.
Congreso Taurino en Sevilla
En el próximo mes de septiembre, coincidiendo con la Feria de San Miguel, se va a celebrar en Sevilla un congreso taurino, que bajo el título de “Fundamentos y Renovación de la Fiesta”, organizan la Universidad de Sevilla y la Consejería de Gobernación y Justicia de la Junta de Andalucía. Mañana martes se presentará en rueda de prensa, pero podemos ir adelantando algo.
Bajo la coordinación del profesor Juan Antonio Carrillo se celebrará el jueves 23, viernes 24 y sábado 25 de septiembre, en el salón de carteles de la Real Maestranza, excepto el viernes tarde que como coincide con la novillada de abono, la sesión será en el Ateneo de Sevilla.
Habrá ponencias y mesas redondas tan interesantes como Fundamentos culturales y éticos de la fiesta, El toro como sujeto de derecho, Derecho al toros y derechos del toro, Teorías de la tauromaquia, La evolución del concepto de la afición taurina, El toro del mañana, etc. Y ponentes desinteresados y tan adecuados como Andrés Amorós, Francis Wolf, Santiago Muñoz Machado, Salvador Boix, Pedro Romero de Solís, Anabel Moreno, Francisco Baena, Paco Ojeda, Carlos Núñez, Fernando Cuadri, Manuel Grosso, Ignacio de Cossío y un largo etcétera. Les dejo enlazada la página Web del congreso para que puedan ver el programa completo y para más información.
Cualquier iniciativa para apoyar al Toro es bienvenida y es la primera vez que tengo noticias de un congreso de esta categoría. Seguro que nos hace aprender y reflexionar acerca de la Fiesta. Espero que entre todos, le demos la difusión, apoyo y participación que se merece el esfuerzo de los organizadores.
Fracaso de Juan Pedro en Algeciras
Voy a los toros a la Feria de Algeciras desde hace muchos años. De joven, cuando ir a Algeciras era un viaje de verdad, iba con mi padre y nos quedábamos en el Hotel Reina Cristina. Por la noche bajaba a sus magníficos jardines a fumar porque todavía no lo hacía delante de él. Ahora voy invitado por el amigo Aurelio López a su peculiar caseta “La Hangarilla”, que está llena de cuadros taurinos, ya que cada año piden uno a un pintor para etiquetar con él su vino. Cuando planeamos la visita de este año, me apunté a la de Morante sin dudar. La del día anterior tenía más garantía por los toros. Después echaron para atrás toda la corrida, se sustituyó por una de Núñez de Cuvillo, y eso que salieron ganando ya que Perera indultó un toro.
En la caseta hablamos de toros durante el almuerzo y comentaban que la corrida era muy cómoda para el torero. Ya sabemos que lo de Juan Pedro está fatal, pero teníamos la esperanza de que en esa plaza con menos exigencias de toro y con menos kilos, quizás ayudaran al milagro diario de Morante, pero nada. Ni chico, ni grande, ni cómodo, ni artista: esto no embiste. Sólo el recibo de capote del primero de Morante desató el ole.
Lo demás nada de nada, o no andaban y si andaban algo era con genio. Morante, Manzanares y Cayetano lo intentaron por todos los medios, pero era imposible, los toros no tenían ningún poder y la emoción era imposible.
En la merienda de esta plaza, que ya saben ustedes que para entre el tercer y el cuarto toro, y mientras Morante le daba caladas a un puro de medio metro, se comentaba el fracaso del ganado, sin ninguna esperanza para la otra mitad de la corrida, y echaban de menos los toros del día anterior. Pero si me preguntan que si prefiero ver a Perera indultar un toro o ver a Morante torear de Capote, aunque sea lo poco que ha podido hacer hoy, yo, que quieren que les diga, me quedo con Morante.
Buena Novillada de El Serrano
La novillada de esta tarde – noche en la Maestranza ha estado bien presentada, en general. Con tres buenos novillos, primero, segundo y sexto, que deberían haber propiciado el triunfo de los novilleros. José María Arenas y José Arévalo, venían placeados, habiendo cortado 36 y 40 orejas, respectivamente, la temporada pasada. Tal y como están las cosas con los novilleros y la crisis, estas cifras son todo un lujo.
Arenas tiene un buen concepto del toreo. Al primero, que era un gran novillo, lo toreó bien, quizás no le dio mas distancia que es lo que parecía pedir el novillo, y lo mató muy bien. En otras condiciones hubiera podido cortar la oreja. Al tercero le dejó que le pegaran mucho en varas y también lo mató de una gran estacada. El sexto fue un buen novillo, y debió de cortarle la oreja si no pincha. Con lo bien que mató a los anteriores debió de dejar algo para este.
José Arevalo no dejo de hacer aspavientos al tendido en toda la tarde. Novillero animoso, recibió a los dos a “porta gayola”, banderilleó y se hartó de chillar. Cae simpático y, con suerte, cortará muchas orejas en plazas de tercera. Tanto él como Arenas banderillearon a sus cinco novillos, a los primeros, conjuntamente, y mostraron siempre mucha disposición y ganas de agradar al público, que es lo memos que se les puede pedir a los que empiezan.
Diego Silveti no tuvo suerte en su debut en Sevilla. Su primer novillo era deslucido, pero ha dejado buena impresión. Torea muy quieto, aguantó coladas con capote y muleta sin mover las zapatillas. Buen quite por gaoneras. Lástima que resultó herido al entrar a matar, pasando a la enfermería de forma torera. Las noticias que llegaron nos tranquilizaron, ya que hablaban de una cornada superficial (entiéndase en el sentido de la superficialidad con que hablan los toreros), y que el domingo podrá torear la Barcelona de la polémica.
La empresa no lo tiene fácil para componer el cartel de viernes de San Miguel con los novilleros triunfadores del abono. Quitando a Martín Núñez, no recuerdo que se haya cortado ninguna oreja más. Así que podrán hacer un cartel a su gusto, quizás con alguno de los de hoy.
III Premio Manuel Ramírez
Como ustedes conocen, este año se acordaron de mí para formar parte del jurado que otorgó el III Premio de Periodismo Taurino Manuel Ramírez, al escritor Mario Vargas Llosa. Este jurado es itinerante, esto es, que lo cambian todos los años, con lo que no tendré el honor de repetir. Según su patrocinador, D. José Moya, presidente de la empresa PERSAN, esto es así porque si no rota el jurado, al final se creen que mandan ellos en vez de PERSAN. Sabio razonamiento.
Como miembro irrepetible del jurado, tuve el placer de asistir al tentadero que en honor del premiado organizó el Sr. Moya en su finca de El Parralejo. Coincide que esta finca había sido antes de uno de los hijos del dictador Trujillo, que es un personaje básico en la novela «La Fiesta del Chivo», de nuestro galardonado escritor. Nos impresionó la naturalidad y sencillez de este narrador capaz de fabular de manera extraordinaria, a veces desde la realidad y en otras ocasiones construyendo universos exclusivos, con un estilo impecable.
Tentó Finito de Córdoba que, desposeído de las incertidumbres que tiene ante el toro, es un torero cabal, profundo y artista, por lo que verlo torear es un placer. Se tentaron tres vacas y un novillote, que irá para semental. Tan bueno era que hasta el maestro Dávila Miura, también miembro irrepetible de este jurado y retirado, como ustedes saben, se tiró al ruedo vestido de particular y dibujó, ya con el novillo agotado, dos tandas con su añorado estilo de largo. Le devolvió los trastos a Finito con un agradecido: Juan “esta muleta torea sola”.
Si agradable fue la velada taurina, aun mejor fue el agasajo posterior, y siguiendo el refrán “al invitado primero por ruín que sea” todos los invitados gozamos de la espléndida hospitalidad de nuestros anfitriones. Sí puedo decir que disfruté de la conversación de Finito casi más que de su faena taurina. Ya saben que cuando coincido con profesionales suelo escuchar más que hablar. La exposición que hizo Juan Serrano sobre la desunión de la profesión, con todo lujo de sucedidos y razonamientos, fue espectacular. A ella se añadieron, con la misma autenticidad, el maestro Dávila Miura y el ganadero Borja Domecq. Un lujo de debate.
Por la noche entrega de premios en la casa de ABC de Sevilla. Les dejo enlazada la noticia. Lo que más me gusta de esta celebración es la cantidad de gente del toro que asiste a ella.
Lástima que es efímero este placer de ser jurado de un extraordinario premio.
“Paquirri” Vuelve a los Carteles
Hace días el torero Rivera Ordóñez se anunció, por primera vez, como Rivera Ordóñez “Paquirri” en la plaza de toros de Albacete.
En una entrevista de burladero.com, que les dejo enlazada, habla sobre los motivos que le han hecho anunciarse con el apodo de su padre y de su ilusión por mantenerlo en el futuro.
Ya he dejado escrito anteriormente mi admiración por la figura de “Paquirri”, y también he escrito algunas veces que, respetando como torero el estilo y las formas de Rivera Ordóñez, no se me puede considerar dentro de sus partidarios.
Saben ustedes que me gustan los apodos en el mundo del toro, ya escribí un comentario “En elogio del apodo”, pero no soy muy partidario de su repetición. “Joselito” sólo hubo uno, y este José Miguel Arroyo que se atrevió a usarlo se hizo un flaco favor. En los tiempos actuales tenemos el ejemplo de “El Cordobés”, cuyo apodo se disputan sus hijos. No tengo nada en contra de que Rivera Ordóñez herede el de su padre, pero podría plantearse anunciarse cómo “Paquirri 2º” o «Paquirri hijo», porque también “Paquirri” hubo sólo uno.
Descastada Corrida del Corpus
La corrida del Corpus en Sevilla estaba siendo soporífera hasta que Salvador Cortés se puso a torear al sexto. Los toros de Martín-Lorca son el espejo del toro artista moderno, las bobas del carretón, descastados, sin poder ni raza, mansitos, sin fuerzas ni motor. Ahora, eso sí, sin una mala mirada, sin un mal gesto y sin la más mínima emoción. Fueron deambulando por el ruedo, cuando no cayéndose o echándose en mitad de faena. Cinco tostones y uno bis, sólo el sexto lo salvó Cortés. No sé hasta cuando vamos a ir aguantando esto, si sé que se mantiene por el abono, pero con estas expectativas estamos echando al aficionado del ruedo, quizás para que no vuelva más.
El sexto casi se mantenía en pie, Cortés, que sabe torear y bien, como ya ha demostrado varias veces, le hizo de enfermero, esperando un eternidad entre serie y serie, y cuajó una faena ligada, rubricada con una estocada que, en otras circunstancias hubiera valido una oreja y, y. Pero el presidente Sr. Salguero, del que desconozco sus antecedentes taurinos, estaba de fiesta, hablando con el público de delante, entre el que se encontraba el ganadero con sus partidarios, pidiendo no solamente las orejas, sino, ríanse ustedes, la vuelta al ruedo para el toro. También desconozco los antecedentes taurinos del asesor artístico, pero entre ambos convirtieron La Maestranza en una plaza de segunda, quizás lo que nos merecíamos.
No sé quien salió contento de la plaza. Seguro que Salvador Cortés sí. Ha vuelto a reivindicarse. El ganadero y su clac supongo que también, ya que podrán contar a las generaciones venideras que a un toro suyo le cortaron dos orejas en Sevilla. Pero el aficionado imparcial, les puedo asegurar que bajaba vencido el tendido.