Las polémicas siempre son bienvenidas a la Fiesta, señal de que ha pasado algo interesante. Vaya por delante que la corrida de Ventorrillo ha sido, de lejos, la mejor de lo que llevamos de abono, con cinco toros para cortarle las orejas y, sobre todo, ha tenido movilidad. Todos los toros, cada uno con sus características, han sido entretenidos porque se han movido hasta el final. Nuestra enhorabuena al ganadero.
La primera oreja de El Juli, fue orejita, aunque el torero estuvo, como siempre, por encima del toro y ya tuvimos la primera discusión. Talavante en su primero, fue a pedir permiso con una cara tristísima. Si la cara es el espejo del ánimo el torero no parecía tenerlo, además, ni había brindado al toro, señal de que no esperaba mucho de él. Al final dos orejas con mucha fuerza porque hizo el toreo vertical y de quietud de hace dos años. Comentamos que El Cid ha estado por debajo de sus dos toros. Su primero pedía otra faena y su segundo, en el que estuvo bien, nos dejó el sabor de boca de que nos perdimos una faena más grande. Se pidió la oreja, no se concedió y hubo polémica.
El Juli salió a por todas en su segundo. Este torero no se quiere dejar ganar la partida por nadie y pensar en un compañero saliendo por la Puerta del Príncipe, lo sublevó. Estuvo por encima del toro. Vino otra polémica cuando una vecina de abono dijo que salía así de decidido por las dos orejas anteriores y que debería salir así siempre, y defendimos otros que no, que ese torero lleva cinco años pudiéndoles a todos los toros. Nos vino a dar la razón Talavante en su último toro, que, aunque es verdad que fue el que menos sirvió, no es de recibo que un torero con dos orejas en el primero no salga a comerse al toro en su segundo y lo despache con una tristeza infinita y sin arriesgar un alamar. Otra polémica tuvimos.
Para rematar la faena y en el ánimo de ponernos de acuerdo, nos vinimos a nuestra tradicional reunión de preferia en la Cervecería Internacional. Allí siguió la polémica sobre el tipo de cerveza que cada uno pidió, pero con la ensaladilla la opinión fue unánime. Al final todos contentos.