Categorías
General

De repente 18 millones de aficionados

Si algo bueno ha tenido este afán prohibicionista del Parlamento catalán ha sido una, por ahora tímida, movilización de la gente del Toro.

De siempre hemos creído que los verdaderos antitaurinos los teníamos dentro. Esos que han conseguido vaciar las plazas a fuerza de darnos un espectáculo descafeinado, con un toro sin casta, ni raza, ni fuerzas y con unas figuras acomodadas. Pero ahora hemos descubierto un enemigo fuera contra el que nos podemos unir para luchar. En una de esas macroencuestas al uso leo, sorprendido, que en España hay 18 millones de aficionados. 18 millones de personas que se supone que a la pregunta de si les gustan los toros,  contestarían que sí. Al menos eso dicen las estadísticas, de esas que mi profesor D. Antonio Pascual intentó convencerme ante mi incredulidad. Y yo me pregunto ¿Dónde estaban esos 18 millones de aficionados ayer domingo? Porque en la plaza de Barcelona no, y en la de El Puerto tampoco, con una paupérrima entrada y esta vez con figuras.

Si en Barcelona, en la primera corrida después de la prohibición, no está la plaza llena, toree quien toree, es que esta batalla está casi perdida. Es momento de reflexión. Los profesionales taurinos deben de pensar por qué han echado a la gente de las plazas, por qué la juventud va a otros espectáculos y no a los toros, por qué en la plaza de toros de El Puerto, hace unos años el sol estaba lleno de pandillas de numerosos jóvenes y ahora no hay ni jóvenes ni  mayores, es que no hay nadie.

Este puede ser un buen momento para un cambio drástico, quizás la última oportunidad de encontrar a todos los estamentos que aman al Toro unidos y dispuestos a ayudar. No lo desaprovechemos.

Pero aún hay esperanzas. Si con esta prohibición hemos conseguido que mi admirado tocayo Ignacio Camacho, no sólo haya escrito cinco de sus diarias columnas sobre el Toro, sino que vaya a la plaza de Barcelona, y que además escriba una crónica taurina que está pidiendo premio Manuel Ramírez, es que no todo está perdido. Señores profesionales de todos los estamentos, un poco de imaginación. Todo el mundo de Toro está unido contra un enemigo común y dispuesto a ayudar, es ahora o nunca.

Compartir

8 respuestas a «De repente 18 millones de aficionados»

Es normal que los tendidos de sol estén vacíos porque con esto del cambio climático el sol pega más fuerte que hace unos años, jejejeje.

Después de la corrida del domingo en la Monumental ha quedado claro que la prohibición de los políticos catalanes es de caracter nacionalista, porque si se hubieran esperado unos años 10-15, Barcelona se hubiera quedado, al igual que Canaria, sin toros por falta de asistencia de gente al espectáculo. A menos que toree JT, pero ese es otro tema.

Lo que sí se deberían de mirar todos los profesionales que ganan direno con los toros, ojo no el sueldo sino dinero y me refiero a toreros , apoderados, ganaderos, empresarios etc… es el rebajarse los beneficios porque así los precios de los abonos y entradas serían más bajos y atractivos para el público. También el hacer más cómodas las plazas de los toros no vendría mal porque hay algunas que, aun siendo delgado, te sientas en dos sitios a la vez y hay veces que aunque no se viva igual el ambiente la gente prefiere verlo por la tele porque es más cómodo y más barato, de ahí que no me sorprenda que haya 18 millones de personas que le gusten los toros y que las plazas estén vacías.

En definitiva lo que quiero decir es que entre todos se debería de buscar la manera de popularizar más la fiesta, porque aun hoy en día muchos creen que los que van a los toros es gente de cierto status social y eso a los progres no les gusta mucho y lo persiguen, aunque después te los vea sentadito en barrera o incluso invitados en el callejón.

Saludos y VIVA LA FIESTA NACIONAL

El aficionado que no va a la plaza (por no aburrirse, por no gastar dinero, o porque tiene algo mejor con qué entretenerse), es un aficionado romántico, en la lejanía o en la nostalgia. Igual que el niño que pega la nariz en el escaparate de la pastelería. Es aficionado a los pasteles, aunque no los coma.

El pasado mes de octubre en las fiestas de El Pilar de Zaragoza, al enterarme de que se había convocado una manifestación antitaurina en la puerta principal de la Plaza de Toros, decidí comprar una bandera española con su particular toro. Una vez en la plaza me vi sorprendido por el gran número de manifestantes antitaurinos. Un amigo y yo decidimos tomar la bandera por cada lado y exponerla delante de los manifestantes. He de decir que a pesar de los improperios que recibimos (hijos de…., asesinos, etc.), nadie de los que acudía a el coso se unió a nosotros. Todos pasaban de largo. Pero lo esperpéntico llegó en el momento en que se dirige hacia mí un miembro de la Policia Nacional, espetándome que o retiro la bandera nacional o me detienen, ya que según palabras suyas «estaba provocando al personal». Como lo leen. Dos personas provocaban a miles de manifestantes. ¿No sería que los que provocaban eran ellos al manifestarse delante de la Plaza de Toros? ¿No sería el principal provocador quien legaliza esa manifestación y en ese lugar? Porque esto es como si un grupo de aficcionados del Betis se van al Sánchez Pizjuán a calentar el ambiente.
Decididamente creo que los antitaurinos nos llevan años de ventaja. Están muy bien organizados, y sueles encontrarte las mismas caras en muchas plazas.

Soy un aficionado que me puedo permitir asistir a los Toros, sobre todo alrededor de mi Autonomia, y se el dinero que eso me cuesta, por eso creo que sobre todo en algunos sitios si se bajasen los precios de las entradas el publico podria asistir más.
Voy aunque solo sea una vez al año a mi querida MAESTRANZA, a pesar lo incomoda que es para una persona como Yo ( Grueso, bueno GORDO), pero si quiero un poco de comodidad me sale cara la entrada.
AL CABO DEL AÑO SALEN UNOS CUANTOS EUROS, OS LO ASEGURO

Lo mejor de este revuelo es que el primer articulista que tenemos hoy España, Ignacio Camacho, haya escrito en defensa del toro.
Pero a partir de ahi callemonos, y los politicos en primer lugar, sobre todo Rajoy, porque lo van a joder en las Cortes.
No olvidemos que por encima de tradiciones, españolismo, cultura y demas analisis, que eso no necesitamos que nos lo explique nadie, hoy por hoy es una aficion minoritaria, aunque paradojicamente no haya fiesta en España donde el toro, en corridas o por la scalles, no este presente.
¿18 millones de aficionados? eso sera lo que tendremos de paro si ZP no se va, pero aficionados, aficionados, dentro de nada cabremos en un autobus de Damas, que supongo que nos hara rebaja, o en la cerveceria Internacional lugar que tanto le gusta a Ignacio.
¡Que nos dejen tranquilos!, que nos liaran mas de lo que esta, esa cosa tan bella que es el toreo.

Acabo de aterrrizar de un viaje fuera de España, y me entero de la triste noticia. Tengo claro que se trata de un absurdo revanchismo político y albergo la esperanza de que se arregle antes de 2012.
Otra cosa que tengo clarísima es que los toros se han convertido en un auténtico artículo de lujo, y que ,a estos precios, es imposible sostener esa afición. O los que viven de esto se dan cuenta y toman las medidas oportunas o la Fiesta queda abocada a su desaparición de muchísimos lugares de España. En los tiempos que corren es necesario más trabajo educativo a un coste muy reducido, para que la gente se entusiasme y quiera saber más de este mundo. Esto debe aplicarse simultáneamente, me explico: hay que ofrecer la oportunidad de asistir a las corridas con aficionados «guía» que vayan indicando el cómo y el por qué se suceden las diversas fases de la lidia. Acabar con los tendidos de sol, pues nos hemos «aburguesado» mucho y ya no se aguanta al sol como antes. siempre pensé que la misma ruina es 4000 espectadores a una media de 50€, que 8000 a 25€ pero la repercusión aumenta y los honorarios en función de los ingresos, pero con los empresarios que hay….eso es una utopía.
Saludos

Cuando era niño mi padre me llevaba a los toros, hoy por hoy me considero un buen aficionado pero no puedo llevar a mis hijos a ver una corrida debido al elevado coste de la entrada. A lo largo del año veo algunos festejos y la verdad dan ganas de no pisar mas una plaza de toros.Decia el maestro Fuentes Bejarano que a los toros el espectador tiene que ir a pasar miedo no a aburrirse como sucede ahora, a veces sale cada cosa por chiqueros que da pena, eso y no otra cosa es loque echa al aficionado de la plaza este espectáculo está necesitado de mas seriedad y precios mas baratos tambie por supuesto de promocion entre los jovenes

D. Ignacio con apoderados como Curro Vazquez no hace faltan enemigos de las fiesta, bochornoso el espectáculo vivido en el Puerto este fin de semana por culpa de escoger burritos para torear en vez de toros. De vergüenza.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *